sábado, 9 de mayo de 2009

DÍA DE LA MADRE

Me preguntaba a mí mismo si se podría escribir algo original sobre la madre, algo que no se hubiera dicho antes…. Y me contesté: la pretensión de un “estreno”, de un dicho nuevo sobre la madre, es tan ridícula como esperar un amanecer "diferente" o una puesta de sol “distinta”: si un día cambiaran, el mundo habría terminado. Como terminaría si un día la mujer-madre pretendiera conjugar verbos distintos de estos: sonreír, atender, perdonar, olvidar, olvidarse de sí, salir al encuentro, esperar, acariciar, consolar, no dormir, sufrir, sacrificarse, decir que sí, rezar, rezar, rezar, trabajar, trabajar, trabajar…
El año pasado, en el Día de la Madre, publiqué algo en otro blog, que sigue teniendo completa validez, como no podría ser de otra manera. Si quieren verlo, pinchen aquí. A la Madre que tenemos en el cielo le pido que bendiga a todas las mamás. Y a las que aspiran a serlo, para que se preparen.

No hay comentarios: