Estamos en 1837. Newman da una serie de Conferencias sobre la Justificación. La última de ellas trata Sobre la predicación del Evangelio. En ella detecta algo muy grave... que, a la vuelta del tiempo, quizás sigue vigente.
"Un sistema de doctrina ha aparecido durante los últimos tres siglos, en el cual la fe o el pensamiento espiritual es contemplado como el fin de la religión, en vez de Cristo. Y de esta manera, se hace consistir la religión en contemplarnos a nosotros mismos, en vez de contemplar a Cristo; consiste no simplemente en mirar a Cristo, sino en asegurarse de que le miramos; no en contemplar su divinidad y su sacrificio expiatorio, sino nuestra conversión y nuestra fe en esas verdades... La moda del día es predicar la conversión, decirle a la gente que estén seguros de mirar a Cristo en vez de mostrárselo simplemente, en decirles que tengan fe, más que en suministrarles el objeto de la fe..., con el resultado de que la fe y la inclinación espiritual se han desarrollado como fines, y obstruyen la vista de Cristo". (Cit. en Newman sacerdote, de Fernando Cavaller, o.c.).
No hay comentarios:
Publicar un comentario